Mujer víctima de violencia de género pide ayuda a través de los deberes de su hijo

En el municipio malagueño de Benalmádena, una mujer estaba siendo prácticamente secuestrada por su marido que la mantenía en total aislamiento. A punta de amenazas, golpes y malos tratos, su marido la mantenía recluida en su casa sin permitirle entablar relaciones sociales, sin acceso a redes sociales, y controlando todos sus movimientos.

Desesperada y asustada, ella se le ocurrió un manera de pedir auxilio sin que se enterara su marido, dejó una nota de SOS entre los deberes de uno de sus hijos con la esperanza de que alguna persona adulta en el colegio la encontrara y pudiera ayudarla. En efecto la maestra del pequeño encontró la nota de auxilio y contactó a las autoridades quienes se ingeniaron un plan para hacer salir a la pareja de la casa, bajo el falso pretexto de una reunión de padres en el colegio. De esa forma, sin levantar sospechas, pudieron hablar con la mujer, quien les contó de la horrible situación a la que era sometida. Acto seguido detuvieron a su marido y ella pudo obtener una orden de alejamiento contra él.

La creatividad de esta mujer maltratada y su valentía le permitió dar el primer paso para salir de esta relación violenta y enfermiza. Y gracias a que el profesorado de la institución supo reaccionar y colaborar con la policía, esta mujer logró tener acceso a los mecanismos de protección estipulados por la ley.

Cualquier mujer puede estar siendo víctima de violencia de género. Le puede estar pasando a una vecina, a una amiga, incluso a nuestra propia madre. Actuar ante esta lacra social es responsabilidad de todas y de todos.

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