Por Ruth Prada Yáñez – Equipo de voluntariado del Observatorio de Violencia
Irun ha sido testigo durante las últimas dos décadas del rechazo que provoca que se hayan incorporado mujeres vestidas de soldados en los desfiles del Alarde. La sociedad y las instituciones se han dividido entre los tradicionalistas, que solo aceptan la figura de la mujer como cantinera, pero no vestidas de soldados, y los que apoyan las compañías mixtas. Por este motivo, ante la celebración el próximo 30 de junio de la XX Edición del Alarde Igualitario de Irún, se ha iniciado una campaña con dos objetivos:
1º Apoyo: mediante el envío a los medios de comunicación de un escrito con la firma de 500 mujeres, encabezado por cinco de ellas como referentes en distintos ámbitos de País Vasco.
2º Visibilización: para conseguir que el próximo sábado 30 de junio, acuda a Irún el mayor número de personas posible, sobre todo mujeres, a solidarizarse y apoyar nuestro Alarde igualitario.
Para apoyar esta iniciativa, puedes acudir al Alarde y también firmar el escrito que te adjuntamos, mediante el envío de tu nombre, dos apellidos y tu número de DNI, a la siguiente dirección de correo-electrónico: 2018alardea@gmail.com
La historia del Alarde igualitario
Durante los últimos años, el Alarde mixto ha ido creciendo y consigue terminar el recorrido por las calles de Irun sin incidentes, aunque el Ayuntamiento lo sigue ignorando. La historia del Alarde Igualitario comenzó a principios de los años noventa, cuando las mujeres pidieron participar de pleno derecho en los desfiles de Irún y de Hondarribia. La iniciativa fue recibida con rechazo tanto en las calles como por parte de las instituciones.
En las calles se vivieron espectáculos bochornosos, como que las mujeres que participaban en las compañías mixtas eran insultadas, zarandeadas y agredidas físicamente. En las instituciones se vivió el mismo rechazo. En el pleno del Ayuntamiento de Irun celebrado el 24 de abril de 1996, el grupo Bidasoa Aldeko Emakumeak presentó una moción que pedía que la ordenanza del Alarde afirmara explícitamente que no se podría negar la participación por motivos de raza, sexo o religión. El resultado fueron 16 votos en contra y 8 a favor: PSOE (8 concejales), PNV (4 concejales) y PP (4 concejales) votaron en contra, y HB, EA e IU, a favor. Tras aquel pleno se intensificaron las acciones de los ‘tradicionalistas’, que negaban el derecho de las mujeres a participar en el Alarde como soldados y solo les permitían el papel secundario de cantineras.
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