Más de 80 Organizaciones de Mujeres, entre las que se encuentra Fundación Mujeres, y de derechos de infancia, se han dirigido al ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, para trasladarle la preocupación por el impulso que se está dando a la figura del “Coordinador Parental” como figura habilitada para intermediar en conflictos entre los progenitores tras la separación o el divorcio.
En un documento remitido al ministerio, recuerdan que el Coordinador Parental no solo carece de regulación, sino que es una figura que se sirve de la coacción en los casos en que hijos e hijas presentan negativa a cumplir los regímenes de visitas. Al contrario que en el caso de la mediación, cuya función está plenamente regulada, el Coordinador Parental no cuenta con límite alguno para intervenir, ni siquiera en posibles contextos de violencia.
Las firmantes consideran muy grave que personas con una “insuficiente y dudosa” formación pasen a engrosar el REGISTRO DE MEDIADORES/AS DEL MINISTERIO DE JUSTICIA.
Las firmantes han manifestado su preocupación ante el hecho de que la alta litigiosidad de los juzgados de familia pueda llegar a mitigarse depositando la resolución de conflictos en manos de personas que pasan a ostentar un poder similar al de los jueces sobre la vida de los miembros de familias en litigio, con tan solo haber acreditado un breve curso de formación con contenidos que ya están siendo cuestionados por profesionales del derecho y la psicología.
Aunque no es la primera denuncia que hacen en este sentido, esta última surge tras la formación propuesta por la Universidad a Distancia de Pontevedra.
Las firmantes denuncian que para ese curso de 6 días lectivos no se exige ningún perfil profesional concreto y en la misiva enviada al ministerio denuncian que este y otros cursos similares alientan el uso en el peritaje forense de sintomatología clínica inexistente y desaconsejada hasta por el Consejo General del Poder Judicial, en una clara referencia al llamado “Síndrome de Alienación Parental” y a la conocida como terapia de la amenaza.
La Coordinación Parental pone en peligro el bienestar y la salud de un número creciente de niños y niñas y exponen a mujeres víctimas de violencia de género a situaciones que vulneran sus derechos reconocidos.
La implantación de los Coordinares Parentales está activándose de forma experimental, en Comunidades Autónomas como Galicia, donde asociaciones del territorio ya han alertado de que los negocios vinculados a la Coordinación Parental ponen en peligro el bienestar y la salud de un número creciente de niños y niñas y exponen a mujeres víctimas de violencia de género a situaciones que vulneran sus derechos reconocidos.
TEXTO COMPLETO (Observaciones y adhesiones): El Coordinador Parental una figura coactiva que suspende derechos y libertades.
Nota de Prensa: Listado de entidades firmantes Contacto para medios Lola Venegas : +34618117312
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