#25N #NoConsientasLaViolenciaFM ¿Qué es la violencia económica?

Por Melany Herrejón – Voluntaria de Fundación Mujeres


En el marco de la campaña del #25N Día Internacional contra la Violencia contra las Mujeres, queremos concienciar sobre la violencia que sufren las mujeres en los diferentes ámbitos de su vida.

La violencia económica es una forma típica de violencia definida como “cualquier acto o comportamiento que causa daño económico a un individuo”. Tiene sus raíces en la desigualad de género y está reforzada por las normas de género tradicionales. Algunos de los tipos de violencia económica usada por los agresores son el control, la explotación y el sabotaje.

Control económico

Se define como impedir, limitar, o controlar las finanzas de la víctima. Está íntimamente relacionada con la toma de decisiones. Algunos ejemplos de control económico:

  1. Controlar la cantidad de dinero que una víctima puede gastar o supervisar el uso que hace del dinero.
  2. Impedir que la víctima pueda tener una cuenta bancaria a su nombre o tomar sus propias decisiones financieras.
  3. Restringir el acceso al dinero, a las necesidades, o a los activos financieros y a la información.

Explotación económica

Significa usar los recursos económicos de una víctima en beneficio del abusador. Algunos ejemplos de explotación económica son:

  1. Abrir una tarjeta de crédito en el nombre de su pareja sin consentimiento, acumulando una deuda bajo el nombre del víctima.
  2. Robar o dañar la propiedad o los recursos de una víctima o venderla sin su permiso.
  3. Tomar salarios, pensiones u otras formas de prestaciones financieras de una víctima sin su permiso.

Sabotaje económico

Impedir que una víctima persiga, obtenga, o mantenga un empleo y/o actividad educativa. Algunos ejemplos de sabotaje económico:

  1. Impedir que una víctima asista a su empleo y/o a sus actividades educativas.
  2. Interferir con el trabajo o educación de una víctima.
  3. Rehusar a contribuir con las responsabilidades de guardería.

Es importante entender que no todas las formas de violencia económica se pueden clasificar en estas categorías. Además, algunas formas de violencia económica pueden combinar varias de las categorías anteriores. Es importante tener en cuenta que la violencia económica se puede manifestar de manera diferente en ciertos contextos (por ejemplo, cultural, social e institucional).

¿Cómo afecta la violencia económica a las víctimas?

Las víctimas experimentan diferentes consecuencias a corto y a largo plazo en referencia a su estabilidad emocional y a su bienestar total. Algunos impactos negativos de la violencia económica experimentada por las víctimas son:

  1. Inseguridad económica: La violencia económica puede exponer a las víctimas a deudas, desempleo, falta de vivienda y/o a no tener los recursos financieros necesarios para la supervivencia diaria.
  2. Salud física: La pobreza, asociada a la violencia económica, acaba resultando en estados de salud negativos. La privación económica puede dificultar la capacidad de las víctimas a buscar y a asistir a centros de salud. También, es posible que muchas de las mujeres recurran al consumo de alcohol o drogas para sobrellevar la violencia.
  3. Bienestar emocional y psicológico: Las víctimas experimentan emociones negativas en referencia a la inseguridad financiera. La violencia económica está asociada con depresión, ansiedad, estrés, estrés postraumático, peor calidad de vida y suicidio.
  4. Desarrollo e independencia personal y profesional: Las víctimas pueden volverse económicamente dependientes de su actual o antigua pareja cuando son persuadidas por sus agresores para tomar decisiones sobre sus propias finanzas o desarrollarse a nivel educacional y profesional.

¿Quiénes están en riesgo?

La violencia económica típicamente ocurre en el contexto de las relaciones de pareja, aunque sin requisito de proximidad física, puede continuar o empezar después de la separación. Una de las grandes causas que imposibilita o dificulta que una mujer pueda salir de una relación abusiva, es el control de los recursos económicos de la víctima.

Globalmente, 1.4 mil millones de mujeres viven en naciones que no reconocen la violencia económica en su legislación o que no proporcionan protección legal a las víctimas.

Una encuesta realizada en la Unión Europea encontró que alrededor del 12% de las mujeres de la UE, han experimentado algún tipo de abuso que implica violencia económica por parte de una pareja a partir de los 15 años.

La pobreza, tener alguna discapacidad o pertenecer a un colectivo desfavorecido, dificulta que las víctimas puedan alcanzar la independencia económica. Si quieres consultar la campaña completa, haz click en el siguiente enlace.

Para más información consulta el siguiente enlace:


Esta actividad forma parte de la campaña de activismo que se lleva a cabo con motivo del día 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, en el marco del «Programa para Educar en Igualdad y Prevenir la Violencia de Género. Hacia un voluntariado por el Buen Trato” de Fundación Mujeres, con la financiación del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 a través de las Subvenciones del 0,7 a actividades de interés social.

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