La educación es el arma más importante para combatir la violencia de género y alcanzar la igualdad en el largo plazo. Por este motivo Fundación Mujeres está realizando talleres de prevención de violencia de género en Institutos de Educación Secundaria españoles. Actualmente están teniendo lugar en varios centros de Fuenlabrada y se realizan en colaboración con el Ayuntamiento de Fuenlabrada y la Casa de la Mujer de Fuenlabrada. Esta educación en valores igualitarios busca sensibilizar y formar a jóvenes en materia de género e igualdad y concretamente se enfocan en la prevención de violencia de género.
En la primera sesión, se comienza preguntando sobre las percepciones y las opiniones de lo qué es la violencia de género, las diferencias entre género y sexo, el feminismo como la búsqueda de la igualdad… Se recuperan algunos recursos visuales de campañas de Fundación Mujeres como por ejemplo los realizados junto con Canal Crimen en #EsCosaDeTodxs, para mostrar a los jóvenes conductas habituales machistas y violentas. Se hace un análisis de los distintos roles, expectativas y estereotipos de género.
La segunda sesión de este taller se centra en romper con la idea del amor romántico y concienciar a lxs adolescentes de la importancia de un amor igualitario. Se les presentan los principales tópicos del amor romántico como son la idea de la entrega total, el control y los celos, la sumisión y necesidad de protección, la obsesión e incluso la locura por amor. Ideas que algunxs creen normales y necesarias en una relación de amor y que sin embargo, generan relaciones dañinas que pueden potencialmente acabar en casos de violencia de género.
Para ello las psicólogas y educadoras encargadas de los talleres utilizan materiales variados y dinámicos. Muchos de ellos son películas (Crepúsculo…), vídeos o música (Amaral, Loquillo…) con los que lxs adolescentes están familiarizados. De este modo se consigue sorprenderlos sobre su alto contenido sexista, del cual anteriormente no se habían percatado. Las reacciones de lxs adolescentes son muy variadas. Mientras que muchxs justifican o ven como algo normal los celos, la mayoría reconocen que la sociedad es machista. No obstante, al hablarles de micromachismos y por ejemplo el “piropear” en la calle, en muchas ocasiones no es percibido como algo sexista o negativo. A pesar de ser un taller de dos sesiones únicamente se consigue que los jóvenes se cuestionen y se hagan consciente del machismo de la sociedad presente.